Con un “gol de vestuario” y un hombre menos desde el minuto 13, Universitario empató ayer 1-1 con Wilstermann y se despidió de la Copa Cine Center. El equipo estudiantil jugó con más garra que buen fútbol, pero no le alcanzó para ganar, un resultado que habría obligado a definir la llave desde la tanda de penales.
La “U”, que estaba obligada a ganar para aspirar a lograr la clasificación desde los 12 pasos, tuvo que batallar contra la corriente desde el arranque del partido, debido a un polémico arbitraje del paceño Luis Irusta y su asistente Daniel Lara.
Cuando apenas comenzaban a ubicarse los equipos en el campo de juego, el atacante aviador Gilbert Álvarez se encontró con un balón frente al portero estudiantil Marcelo Robledo y lo fusiló para anotar el 0-1 a los cuatro minutos.
El tanto, en posición legal, fue reclamado de manera airada por los jugadores capitalinos, que arremetieron en contra del juez Lara, entendiendo que el gol era ilícito por una supuesta posición adelantada.
Sin embargo, el línea convalidó el gol y el árbitro amonestó a los jugadores locales Juan Pablo Rioja y Eduardo Valecillo.
El “gol de camerino” no desmotivó a Universitario, que respondió cinco minutos después con un centro de Alexis Bravo que Miguel Hoyos cabeceó para forzar la respuesta del portero Alex Arancibia.
Sin embargo, se produjo otra acción que cambió el rumbo del partido. A los 13’, Rioja cometió una falta en mitad de cancha, recibió la segunda tarjeta amarilla y fue expulsado.
El gol en contra sumado a esta expulsión mermó la capacidad ofensiva del club capitalino, al que no le servía otro resultado que no fuera la victoria para forzar a los penales, ya que había perdido en el encuentro de ida (4-0), a mitad de semana en Cochabamba.
Sin embargo, a pesar de tener un jugador más en cancha y la ventaja en el marcador, Wilstermann no pudo superar futbolísticamente a la “U”, que se adueñó del balón, pero no tenía profundidad para inquietar a Arancibia.
Un remate de Bravo que por poco se introdujo al ángulo del arco aviador (17’) y un disparo elevado de Aldo Velasco tras una buena jugada individual (21’) fueron lo único de un primer tiempo bastante conservador.
En el complemento, con apenas medio minuto de juego, el árbitro paceño volvió a ser protagonista con una decisión polémica. Cobró un penal a favor de Wilstermann por una supuesta mano de Hoyos tras un centro desde la izquierda.
Sin embargo, el defensor estudiantil salió del campo de juego con una hemorragia nasal producto del balonazo que recibió en la cara en la jugada marcada como penal.
A los 3’, Marcelo Bergese no pudo cambiar la pena máxima por gol al estrellar su remate al poste derecho de Robledo, quien intuyó el remate y logró despejar el disparo del volante aviador.
Esta jugada envalentonó a los locales, que volvieron a tomar la iniciativa del cotejo ante un Wilstermann que quiso cerrar muy temprano el partido, durmiendo la pelota lo más que podían.
Bravo, el abanderado del ataque estudiantil, elevó un centro pasado que el brasileño Magne Costas no pudo introducir de cabeza al pórtico valluno (73’).
Siete minutos después, Bravo cobró un tiro libre al borde del área, remató por encima de la barrera, el balón golpeó en el poste izquierdo de Arancibia y luego se introdujo en el pórtico aviador; era el 1-1 a los 80’.
Restaban diez minutos de juego y la ilusión estudiantil volvió a crecer, empero, el ansiado gol del triunfo no llegó y Universitario quedó fuera del torneo de invierno ante el vigente campeón liguero.
Alexis Bravo Volante-Universitario
"Dentro del campo de juego fuimos superiores”.
Gilbert Álvarez Delantero-Wilstermann
"Es importante marcar goles para agarrar confianza”.
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